La enorme crecida del río Genil a causa de las últimas lluvias, el desembalse de agua del pantano de Iznájar y otros factores como el hecho de que los arroyos que desembocan en él hayan aumentado también considerablemente su caudal, ha provocado el desbordamiento del río Genil a su paso por Badolatosa, traspasando incluso un tramo de carretera en la Avenida Pablo Iglesias y amenazando con inundar las cocheras y viviendas anexas, según informó ayer el Ayuntamiento de Badolatosa en nota de prensa.
En la actualidad, el tramo de la Avenida de Pablo Iglesias desde Correos hasta la desviación hacia Puente Genil permanece cerrado al tráfico y el Ayuntamiento ha puesto en marcha una actuación de urgencia desplegando todos los efectivos posibles: albañiles del PFOEA, operarios municipales, policía local, etc., con el fin de achicar el agua, levantar unos tabiques de cemento a la entrada de viviendas y cocheras, así como ensanchar los desagües de las zonas afectadas.
Según palabras del alcalde, Luis Romero, “estamos en permanente contacto con los técnicos del pantano de Iznájar, que por el momento nos han confirmado que no van a soltar más agua, así como hemos informado a la Diputación y otros organismos competentes de la situación actual del municipio. Ahora nuestra prioridad es actuar en la prevención de daños mayores en la zona afectada», señaló el primer edil.
En este sentido, Romero ha señalado que aunque él no recuerda personalmente un desbordamiento del río en Badolatosa, la última vez que se produjo una inundación de este tipo fue en el año 1.963. Asimismo, ha confirmado que en Corcoya la situación no es preocupante, ya que allí el peligro de inundación radica en el arroyo San Fernando, que de hecho se desbordó la pasada Nochebuena, y en estos momentos no existe peligro.