El fuerte viento que durante toda la jornada de ayer azotó la Sierra Sur de Sevilla, al igual que al resto de la provincia, provocó algunas incidencias en localidades como Estea, donde las rachas de viento superaron los 40 kilómetros por hora, según la Agencia Estatal de Meteorología. El suceso más destacable se produjo en la calle Nuestra Señora de la Asunción con el desprendimiento de un tejado de chapa desde una vivienda que cayó en medio de la calle sin que hubiera que lamentar daños personales.

Según han relatado a este periódico vecinos de la misma calle que se encontraban en el momento del desprendimiento en sus viviendas, los hechos ocurrieron hacia las seis de la tarde, momento en el que se sintió un fuerte estruendo en mitad de la calle y numerosos vecinos salieron de sus casas para ver qué había pasado.

Contemplaron entonces que se trataba de un techo de chapa que se había desprendido de una casa, había volado hacia la fachada de la casa de enfrente y, al chocar, había caído en medio de la calle, sobre un vehículo que estaba aparcado, sin que ocasionara daños a nadie. La Policía Local, que se encontraba casualmente patrullando muy cerca, se personó rápidamente en el lugar de los hechos y procedió a cortar la calle, que no volvió a abrirse al tráfico hasta que el tejado de chapa fue retirado.

Los vecinos de la calle pensaron en un primer momento que el tejado pertenecería al cerrado Cine Florida, situado en una esquina de esta misma calle, si bien la propia vecina dueña del techo desprendido confirmó que era suyo, han indicado vecinos de la calle a este periódico.

La Agencia Estatal de Meteorología indicó ayer que la zona de la Sierra Sur se encontraba en alerta naranja por fuertes vientos, alerta que descendió a amarilla a partir de las nueve de la noche, si bien el aire ha seguido soplando con mucha fuerza durante toda la madrugada.

Asimismo, vecinos de la calle Sol de Estepa informaron también a este periódico del desprendimiento de unas placas solares desde un bloque de pisos de esta calle, que en la mañana de ayer permanecían en medio de la vía, adonde habían caído desde la azotea del edificio por la fuerza del viento que afectó a la zona en la madrugada del viernes al sábado. También se produjo el desprendimiento de un muro de unos diez metros en el convento de los padres franciscanos, según ha podido saber periódico.

De hecho, la provincia de Sevilla, con 802 avisos al 112 por fuertes vientos, ha sido junto con Cádiz la provincia andaluza en la que se han producido más incidencias.