El Colectivo de Unidad de los Trabajadores-Bloque Andaluz de Izquierdas (CUT-BAI), formación integrada en IULV-CA que lidera el parlamentario y alcalde de Marinaleda Juan Manuel Sánchez Gordillo, celebra hoy domingo en Sevilla su IV Congreso, donde debatirá un documento político en el que reclama un «proceso constituyente» en Andalucía como «expresión política de independencia» porque defiende que «Andalucía no es España, existió antes de que se configurara el Estado español y seguirá existiendo tras su caída», informó la agencia Europa Press el pasado viernes.
Doscientos delegados en representación de 3.000 militantes del CUT-BAI participarán en el cónclave que, bajo el lema ‘Andalucía, soberanía para la libertad’, dará luz verde a un documento, consultado por Europa Press, en el que se define a Andalucía como «una de las naciones europeas más antiguas», se señala que «se configuró como estado independiente en varias ocasiones, destacando las etapas de Tartessos y Al-Andalus», y se reivindica la «singularidad, historia y cultura común de muchos siglos legitiman al pueblo andaluz para ser sujeto político de su propia soberanía».
«No nos falta historia, nos falta conocimiento de nuestra historia. Andalucía no es España, existió antes de que se configurara el Estado español y seguirá existiendo tras su caída», añade el texto elaborado por el CUT-BAI, que lamenta que «la conquista española que duró ocho siglos truncó el renacimiento cultural andaluz y generalizó el latifundismo, que sigue representando hoy una de las grandes trabas para el progreso de Andalucía».
Ya en referencia al siglo XX, el documento destaca que Andalucía es una «nacionalidad histórica como la que más» con base en el «andalucismo histórico» planteado desde la Asamblea de Córdoba de 1919, critica que la «identidad andaluza fue sustraída» tras la Guerra Civil «para asimilarla a la España nacional católica» y que con posterioridad Andalucía «fue víctima del apaño de la Transición donde las cúpulas de la izquierda reformista (PSOE, PCE, UGT y CCOO) pactaron con las residuos del franquismo la reforma del régimen».
«Andalucía ha llegado al siglo XXI como un territorio subdesarrollado en lo económico, sometido a los poderes políticos de la UE y del Estado español y alineado en lo simbólico-cultural y no puede salir de la situación en la que se encuentra bajo el doble yugo de la UE y del Estado español», añade el CUT-BAI, que apuesta por «construir un futuro propio junto al resto de los pueblos del Mediterráneo por fuera del euro y de la UE, por fuera de la esclavización española y por ello exigimos el derecho de soberanía para que sean sólo y únicamente los andaluces los que en cada momento decidan su futuro».