Juan José Cortés «ha dicho literalmente que Estepa no es un pueblo racista, al mismo tiempo que ha hecho un llamamiento a la calma a todas las partes y ha pedido que se desconvoquen las posibles manifestaciones que de modo ilegal se están realizando.» En su llamamiento, el padre de la tristemente famosa Mari Luz Cortés «ha pedido cordura y que se evite cualquier tipo de acto violento. Su caso es especialmente dramático, ya que su hija fue asesinada, y ha afirmado que más grave que el caso de su hija no es lo que aquí está pasando, y en cambio él sigue confiando en la Justicia. Juan José Cortés, que venía con muletas por un accidente sufrido mientras jugaba al fútbol, ha confiado en un final justo de esta situación.
En estos mismos términos se quiere expresar también el Ayuntamiento de Estepa, que ha vuelto a pedir a la población «calma y confianza en la justicia, por una Estepa sin violencia. No somos un pueblo violento y tenemos que demostrarlo. Igualmente queremos hacer comprender que hasta donde llegan las competencias del Ayuntamiento, todo está hecho; ahora lo ocurrido está en manos de la Justicia, y son otros estamentos los que tienen que pronunciarse.»