Como ha ocurrido en el resto de la provincia, incluida la capital hispalense, las previsiones meteorológicas no se equivocaron para el Jueves y Viernes Santo y la lluvia, a veces incluso forma de tormenta, hizo acto de presencia en la Sierra Sur sevillana, impidiendo la salida de procesiones en la mayoría de nuestros pueblos. El Sábado Santo tampoco pudieron procesionar la mayoría de las hermandades de la zona, tales como las del Santo Entierro de Osuna o Estepa, por ejemplo.
Haciendo un repaso de lo que han sido los últimos días de la Semana Santa en nuestra comarca, según los datos que El Digital ha podido recopilar, indicamos cómo han transcurrido estos en algunos pueblos de la zona.
En Osuna, por ejemplo, las dos hermandades que procesionan en la tarde del Jueves Santo se atrevieron a salir a la calle pese a las previsiones de lluvia. La Hermandad de Jesús Caído, con un recorrido más largo desde que sale de la Colegiata por las obras de la parroquia donde tiene su sede canónica, estipuló un recorrido más corto. No obstante, aún así les terminó sorprendiendo la lluvia estando todavía en la calle. Por su parte, la Humildad y Paciencia fue también sorprendida por la lluvia aproximadamente por la calle Navalagrulla, ya cerca de su templo, la Iglesia del Carmen, por lo que se aligeró el paso al final del recorrido.
Ni el Viernes ni el Sábado Santo ha procesionado ninguna hermandad en Osuna. La Hermandad de la Quinta Angustia realizó un vía crucis en el interior de la Iglesia de la Victoria al suspender la salida por la lluvia, como ya es costumbre cuando la cofradía no puede salir a la calle en la noche del Viernes Santo.
En el caso de Estepa, ni siquiera salió la hermandad que hace estación de penitencia el Jueves Santo, la de Paz y Caridad, por lo que los estepeños vieron este año finalizada su Semana Santa en cuanto a salidas procesionales se refiere el pasado Miércoles Santo, al igual que ha ocurrido en Sevilla, por ejemplo. Tampoco el Viernes ni el Sábado Santo ha acompañado el tiempo para las hermandades de estos dos días.
En su vecina localidad de Lora de Estepa, la lluvia deslució algo el desfile del Jueves Santo, ya que Hermandad de Nuestro Padre Jesus Nazareno, Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima de los Dolores redujo éste a una hora de duración para evitar ser sorprendidos por la lluvia, si bien al menos pudieron realizar la estación de penitencia, algo que no pudo repetirse ni Viernes ni Sábado Santo.
En la cercana localidad de Casariche, por su parte, la Hermandad de Jesús Cautivo acordó salir una hora más tarde a la espera de que las previsiones mejorasen y finalmente salió, con un recorrido más corto, eso sí, en la tarde del Jueves Santo. En la mañana del Viernes Santo, la esperada salida de Jesús Nazareno se vio truncada por la lluvia que caía justo a las ocho de la mañana, hora prevista de la salida, si bien en una tregua dada por la lluvia, los dos pasos de la cofradía, el de Jesús y el de la Virgen de la Esperanza, salieron de su capilla y permanecieron en la puerta a modo de presentación ante los fieles allí congregados durante un breve espacio de tiempo, en el que la banda interpretó algunas marchas procesionales, tras lo cual se procedió a la entrada pues la amenaza de lluvia era evidente, como se confirmó momentos después.
Por último, nos referimos a Pedrera para indicar que la Hermandad de San Juan y María Santísima de Paz y Esperanza, que hace estación de penitencia el Jueves Santo, sólo pudo estar en la calle una hora debido a la lluvia, a la que se atrevió a desafiar. Ni el Viernes ni el Sábado Santo, el resto de hermandades de la localidad pedrereña, como es el caso de la Hermandad del Santo Cristo o la Hermandad de Jesús Nazareno, pudieron realizar su estación de penitencia.