La tensión que acompañó la campaña electoral en Estepa estuvo también presente en el pleno de toma de posesión del nuevo alcalde de Estepa, Miguel Fernández Baena, que se celebró ayer, 11 de junio, a las 12 del mediodía, en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Estepa, que estaba lleno a rebosar de público, principalmente partidarios del nuevo primer edil andalucista, pero también algunos simpatizantes y militantes de las otras dos fuerzas políticas que conforman el Consistorio estepeño, PSOE y PP. La dureza de las declaraciones de los distintos representantes de los partidos una vez tomaron la palabra fue buena muestra de la tensión que se palpaba en el ambiente de esta sesión plenaria que se desarrolló con diversas interrupciones del público, unas veces aclamando y aplaudiendo y otras abucheando, según el momento, y que tuvo una duración de una hora.
La sesión constitutiva comenzó con la formación de la mesa de edad del Ayuntamiento, formada según indica la Ley Electoral por el concejal de más edad y el más joven de la corporación, que en el caso de Estepa son Juan García Baena (PSOE) y Carmen Sánchez Quirós (PA) respectivamente, quienes estuvieron acompañados en la misma por la secretaria del Ayuntamiento de Estepa, María José Ardanaz Prieto, y la interventora municipal, María Ángeles García Castillo.
Tras la lectura de varios artículos de la Ley Electoral y la aclaración, por parte de la secretaria, de que la celebración del pleno responde al mandato legal de que los ayuntamientos han de constituirse veinte días después de la celebración de las elecciones municipales, el concejal de más edad, en este caso García Baena, dio paso a la comprobación de las acreditaciones de los concejales presentadas por la junta electoral de zona y se procedió al juramento o promesa, según los casos, de los cargos electos ante un ejemplar de la Constitución Española, que presidió este acto solemne. Los tres concejales del PP, Joaquín Fernández Muñoz, María Remedios Olmedo Borrego y Salvador Jesús Rodríguez Ávalos, juraron su cargo, mientras que el resto en su gran mayoría optó por la fórmula de prometerlo.
A continuación, llegó el momento en el que la secretaria municipal pregunta a los concejales presentes quién o quienes se postulan como candidatos a la alcadía, ya que recordamos que cualquier cabeza de lista puede optar a ser alcalde independientemente de que haya o no ganado las elecciones. Es precisamente gracias a esta opción por lo que alcaldables como los nuevos ediles de Herrera, Écija o La Roda han podido acceder a la alcaldía de sus respectivos municipios, a pesar de no haber sido las suyas las listas más votadas.
El Partido Popular de Estepa anunció entonces que su candidato, Joaquín Fernández, renunciaba a presentar su candidatura. Tampoco se presentó como candidato el socialista Juan García Baena, por lo que el único que fue proclamado candidato fue Miguel Fernández Baena (PA), lo que provocó que el público presente prorrumpiera en aplausos al pensar que el andalucista ya había sido nombrado alcalde, hecho que aún no se había producido pues tenía todavía que llevarse a cabo la votación de todos los concejales, por lo que la secretaria tuvo que intervenir aclarando este extremo y pidiendo silencio en la sala, que vivió unos momentos de máxima agitación.
Los 17 concejales que forman la corporación estepeña procedieron a votar a mano alzada y la votación arrojó el resultado de 11 votos a favor de la proclamación de Miguel Fernández Baena como alcalde (8 votos de su partido, el PA, y los tres del PP, que apoyó su investidura) y seis abstenciones, las del Partido Socialista. De nuevo se vivieron momentos tensos en la sala, con los vítores y gritos de aliento de los presentes al recién proclamado alcalde, que tomó asiento en la mesa presidencial y dio paso a los distintos portavoces de los tres partidos políticos para que realizaran los discursos de rigor propios de este tipo de sesión plenaria.
El primero en tomar la palabra fue el candidato popular, Joaquín Fernández, quien agradeció al pueblo de Estepa su interés en ir a votar y especialmente a las 1.700 personas que depositaron su confianza en ellos. Felicitó, asimismo, al PA y al nuevo alcalde, y comentó que el Estepa había apostado por el cambio político y que “la sucesión en el gobierno es natural porque no hay propietarios eternos de la voluntad del pueblo.” Fernández Muñoz dijo que se abría ayer una nueva etapa en Estepa con el resultado histórico que arrojaron las elecciones del 22 de mayo, y que su grupo afronta el futuro con ilusión. El PP aclaró que habían apoyado la investidura del candidato andalucista “sin contrapartidas” con el fin de respetar la voluntad del pueblo “en un ejercicio de responsabilidad política, porque nos hemos hecho eco del cambio político deseado por la ciudadanía”. Joaquín Fernández reconoció entonces que habían ofrecido al PA un pacto de gobierno pero que éste lo había rechazado. “Creo que se equivocan, pero también tienen derecho a equivocarse”, espetó. Explicó entonces que el PA les encontrará en la oposición, que es donde han querido que estén, y que tendrán que ganarse su confianza porque el que les hayan apoyado para la proclamación como alcalde no es un cheque en blanco que les dan al nuevo gobierno municipal. Fernández finalizó su intervención deseando suerte al nuevo alcalde “porque su suerte será la de todos los estepeños.”
La felicitación realizada por el PP a Miguel Fernández Baena no se dio en el caso del PSOE, cuyo portavoz, Juan García Baena, terminó su alocución con un rotundo “suerte, Estepa” de cara al nuevo ciclo que ayer comenzó, pero no felicitó en ningún momento al nuevo alcalde, dejando patente la falta de simpatía existente entre los distintos partidos políticos que forman la corporación municipal. También fue comentado por el público asistente el hecho de que el nuevo primer edil cogiera directamente de sobre la mesa el bastón de mando, símbolo de su nombramiento como alcalde, y éste no le fuera entregado de manos del alcalde saliente, García Baena.
Juan García Baena comenzó su intervención agradeciendo a los ciudadanos la confianza depositada en el PSOE durante los últimos 32 años y agradeció personalmente el haber sido el alcalde más longevo de la democracia en Estepa (17 años). Agradeció también el trabajo de su equipo de gobierno saliente e hizo un repaso de todo lo conseguido en los 17 años en los que ha regido el Ayuntamiento de Estepa y, especialmente, en los últimos cuatro, señalando que habían realizado un gran esfuerzo desde 2008 para paliar en lo posible la crisis que padece España en general. “Me llevo la satisfacción y el cariño de muchos de mis mayores”, dijo, y añadió que “aceptamos, como demócratas, el irnos de la alcaldía. Me voy con la cabeza bien alta, y con el orgullo de haber sido servidor público y no haber cobrado nunca por este cargo.” Explicó que su grupo haría durante los próximos cuatro años una oposición constructiva en pro de los intereses estepeños y terminó diciendo que “para el nuevo ciclo que hoy comenzamos, suerte, Estepa.”
Uno de los discursos más duros fue el del Partido Andalucista, pronunciado por el concejal Antonio Jurado, que comenzó señalando que “se está produciendo hoy algo desconocido en Estepa, que es la alternancia política”. Dijo que la candidatura del PA había superado a “las multinacionales de la política que son PSOE y PP”, y se refirió a la dura campaña electoral en Estepa, “marcada por los ataques personales y las tergiversaciones del PSOE”, al que acusó de no haber dudado de desprestigiar al adversario e incluso de atacar a “funcionarios que tienen a su cargo la seguridad ciudadana”, en clara alusión a la polémica surgida dos días antes del final de la campaña a cuenta de la filtración de una conversación privada entre el jefe de la Policía Local de Estepa y uno de los concejales socialistas en la que se hablaba de los resultados de las pruebas de acceso a plazas de la Policía Local.
Jurado acusó también al PSOE de crear una “tupida red” de intereses y personas a su cargo y de frenar el desarrollo de Estepa, generando dos clases de personas en la localidad, “los afines al PSOE y los excluidos”, de los que dijo que “unos han estado recibiendo favores, y los otros hemos estado aguantando y pagando impuestos” en lo que calificó de “régimen caciquil que hoy fenece”. Añadió que la política socialista se ha basado en el enchufismo, en una ejecución del patrimonio que “nadie pidió”, y en una deuda “de dimensiones desconocidas”, punto éste en el que anunció que el nuevo equipo de gobierno va a realizar una auditoría interna de la que se publicarán los resultados “para que todos sepan del inviable proceder socialista” durante sus años de gobierno.
Terminado el turno de intervenciones de los grupos municipales fue el turno de la intervención del nuevo alcalde, Miguel Fernández, que comenzó su discurso agradeciendo el apoyo recibido a su familia, compañeros de partido y compañeros de trabajo del IES Aguilar y Cano, así como a la derecha democrática estepeña por haber apoyado al gobierno andalucista. Fernández Baena dijo que se estaba celebrando “no la victoria de un partido sino un acto de libertad”, así como el triunfo de la “esperanza sobre el temor”, e indicó que “los que hasta ahora han disfrutado de privilegios tendrán que renunciar a ellos, mientras que a los que no los han tenido les digo que habrán de tener paciencia”, pues se hará necesario el esfuerzo de todos para superar la crisis y se han de respetar todas las opiniones políticas.
El nuevo alcalde de Estepa también dijo que la alternancia que se ha producido en el gobierno municipal significa que “Estepa puede mover a cualquier gobierno de la alcaldía si considera que ya no sirve a los intereses del pueblo” y citó una parte de la Declaración de la Independencia de los Estados Unidos. “Los estepeños han recuperado el Ayuntamiento, se ha producido un movimiento de liberación, una marea de cambio”, indicó, al tiempo que interpretó el aumento de la participación ciudadana en las elecciones como una “muestra de la percepción que de la utilidad de su voto tiene la ciudadanía estepeña.”
Miguel Fernández repasó los que serán los ejes de la acción de su gobierno, destacando la austeridad en el gasto público e indicando que “aunque la situación del Ayuntamiento es lamentable, es recuperable a medio y largo plazo.” También garantizó el acceso al empleo público bajo los principios de igualdad, mérito y capacidad, tal y como anunciara en su campaña electoral, y dijo que “el Ayuntamiento debe dejar de ser la primera empresa de Estepa.” “Tenemos ante nosotros una inmensa tarea que nos llevará tiempo y paciencia, porque no se puede arreglar en un día lo que se ha estropeado en 16 años de falta absoluta de democracia en nuestra ciudad”, comentó el nuevo regidor, que volvió a prometer “una Estepa de todos con el esfuerzo de todos” y finalizó su discurso diciendo que “en vuestras manos más que en las mías está el exito o el fracaso de nuestro empeño.”